La experiencia del empleado personalizada es aquella que tiene en cuenta las situaciones, las necesidades y las preferencias únicas del empleado, para ofrecerle una experiencia personalizada en función de sus necesidades.
Diseña, planifica y ejecuta experiencias de trabajo personales, del mismo modo que gestionas las experiencias de los clientes. Aunque la comunicación masiva y otras estrategias de gran alcance puedan parecer más rentables, tienden a crear una atmósfera impersonal, en la que ningún empleado se siente importante o comprendido. Personaliza tus comunicaciones y procesos en la trayectoria del empleado, de modo que tengan el apoyo y la orientación específicos que necesitan para hacer un trabajo excelente.
Las experiencias personalizadas proporcionan el apoyo y la comodidad necesarias para abordar las tareas que más agotan a nivel mental. Además, si la trayectoria del empleado se personaliza adecuadamente, la empresa en su conjunto se beneficia, ya que obtiene visibilidad sobre cómo la satisfacción de un empleado puede afectar a la capacidad general de la empresa de generar ingresos.